Pese a sus múltiples bondades para la salud, la lactosa no es siempre bien recibida por nuestro organismo, generando una serie de síntomas bastante desagradables que desembocan en una patología cada vez más común. Este es el caso de la Intolerancia a la Lactosa, cuyo diagnóstico y tratamiento es bastante sencillo, sin embargo, debe ser tratada a tiempo para evitar mayores daños posteriormente.