La hipertensión arterial, un problema que puede controlarse

Equipo SaludActual

La presión sanguínea es la fuerza que ejerce la sangre circulante sobre las paredes de los vasos sanguíneos: arterias, venas, vasos capilares y arteriola. Y constituye uno de los signos vitales. En este sentido, presentaremos uno de los problemas que se pueden presentar: la hipertensión.

En palabras simples, la hipertensión arterial es el aumento crónico de la presión sanguínea. Para comprenderlo, cuando uno se toma la presión se mide en milímetros de mercurio (mmHg).

De esta medición saldrán dos valores: la tensión sistólica, que es el número más alto y señala la presión que genera el corazón cuando bombea la sangre al resto del cuerpo; y la tensión diastólica, que es el número más bajo e indica la presión entre latidos que hay en los vasos sanguíneos.

Por lo anterior, la hipertensión existe cuando uno de los dos valores es más alto de lo normal. Por lo que, para entenderlo mejor, a continuación te presentamos los valores:

•  Presión normal: menos de 120/80 mmHg
•  Pre-hipertensión: 120/80 a 139/89 mmHg
•  Estadio 1 de hipertensión: 140/90 a 159/99 mmHg
•  Estadio 2 de hipertensión: 160/109 a 179/109 mmHg 
•  Estadio 3 de hipertensión: mayor de 179/109 mmHg

Aunque existen muchos factores que influyen en la subida de presión, hay algunos que son más comunes: excesivo consumo de sal, sobrepeso, estrés y ansiedad (crónico y/o en demasía), fumar, la diabetes y antecedentes familiares.

Entonces, se podría decir que hay algunos hábitos que pueden provocar este mal.

Asimismo, con la edad, los vasos sanguíneos se vuelven más rígidos, por lo que puede que aumente la presión arterial. En este sentido, hay causas que no son modificables como el sexo y la edad

Incluso la raza puede influir en la propensión a ser hipertenso: se dice que las personas negras tienen el doble de posibilidades de tener trastorno que una persona blanca.

Por otro lado, al sufrir esta enfermedad las probabilidades de tener un accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca, ataque cardíaco o enfermedad renal aumentan, por lo que, en casos graves, se puede llegar a una muerte temprana.

De todas maneras, si el padecimiento es detectado por algún médico (por eso siempre es recomendable tomarse la presión cuando visita a algún profesional de la salud) de forma temprana, se pueden hacer cambios en el estilo de vida que ayudarán a mantener la presión arterial en niveles normales como.

Ejemplos de estos cambios positivos son:

-Si fuma, dejar el cigarrillo

-Reducir el consumo de sal

-Consumir más agua

- Incluir una rutina de ejercicios por lo menos tres veces por semana por 30 minutos, entre otros.

En conclusión, es necesario chequearse la presión arterial periódicamente, comer de forma saludable y mantener actividad física para permitir que nuestro corazón y nuestras arterias estén saludables.

Así, podemos evitar enfermedades que pueden ser fatales.

Mireya Guzmán.

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