07/08/2009
Se trata de la Terapia Fotodinámica (TFD), que ayudaría a contrarrestar el cáncer a la piel y que en la actualidad varios especialistas están utilizando como método para distintas afecciones a la piel.
Cada año miles de personas mueren en el mundo a causa del cáncer a la piel. Sin embargo, un tratamiento de gran efectividad, resultado de 20 años de investigaciones, que se está utilizando con éxito en Estados Unidos y Europa, llegó a nuestro país para tratar esta compleja enfermedad.
Se trata de la Terapia Fotodinámica (TFD), que ayudaría a contrarrestar el cáncer a la piel y que en la actualidad varios especialistas están utilizando como método para distintas afecciones a la piel.
Según se sabe la TFD, está basada en la fotooxidación de materiales biológicos que involucra la administración tópica de un compuesto fotosensibilizante en determinadas células o tejidos tumorales, seguida de la irradiación sobre la lesión con una luz visible (en presencia de oxígeno), adecuada en longitud y en dosis suficiente. La combinación de estos dos elementos, que individualmente no son tóxicos, serían los responsable de la destrucción selectiva del tejido dañado.
Lo que significaría que las células expuestas a la luz, a través del medicamento fotosensibilizante penetran en la piel resultando destruidas, provocando que paciente se recupera totalmente.
En este sentido la TFD sería ideal para el tratamiento de lesiones cutáneas, ya que con la accesibilidad de la piel hace que las técnicas de iluminación sean relativamente sencillas y otorga excelentes resultados cosméticos, comparados con la cirugía o la crioterapia en patología oncológica.
El dermatólogo y académico de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Ariel Hasson, sostiene que el TFD ?es una modalidad terapéutica eficaz y segura, con muy buena tolerancia que está siendo utilizada especialmente para el tratamiento de queratosis actínicas (lesiones precancerígenas), carcinomas basocelulares superficiales y nodulares, y en carcinomas in situ superficiales o enfermedad de Bowen?.
Empleada para tumores hasta acné
Conjuntamente el doctor explica que la TFD está indicada para el tratamiento de lesiones cutáneas cancerígenas que no sean melanoma. ?Es una modalidad terapéutica eficaz y segura, que está siendo utilizada especialmente para el tratamiento de queratosis actínicas (lesiones precancerígenas), carcinomas basocelulares superficiales, nodulares y enfermedad de Bowen?.
El facultativo agrega que la TFD además está siendo empleada para el tratamiento de acné, rejuvenecimiento cutáneo, verrugas y rosácea. ?Nosotros tenemos una amplia experiencia de TFD en pacientes con piel muy dañada y múltiples queratosis actínicas, así como en el uso de TFD en pacientes inmuno-suprimidos o trasplantados, los cuales son más propensos a presentar lesiones cancerígenas?. Asimismo, se han obtenido excelentes resultados en patología inflamatoria como Morfea o la Sarcoidosis, y también mejora la pigmentación de la piel y el acné gracias a la TFD.
Mecanismo de acción de la TFD
Según los especialistas, el tratamiento actúa con el compuesto fotosensibilizante más la fuente de luz, los que juntos generan radicales libres de Oxígeno, que son los que destruirán los tejidos dañados, es decir selectivamente se eliminan las células más envejecidas, con pre cáncer o cáncer.
El fotosensibilizante se aplica en la piel, especialmente en las glándulas sebáceas, tejidos precancerígenos o cancerígenos. Generando protoporfirina IX la que expuesta a la luz se va a degradar en radicales libres de Oxígeno, los que destruyen los tejidos dañados provocando muerte celular, sin afectar el tejido que no tiene la lesión?, concluye el facultativo.