29/03/2010
El tratamiento para el sida ha sido siempre uno de los mayores para la medicina. Sin embargo, un nuevo antibiótico llamado cotrimoxazole puede ayudar a aquellos portadores de VIH que se encuentran en etapas de riesgo.
Según el artículo publicado en la revista The Lancet, los científicos aseguran que si a los pacientes recién diagnosticados se les administrara un antibiótico para el VIH, la mortalidad en las primeras etapas de la enfermedad, se reduciría a la mitad. (terra.cl)
El uso diario de este tratamiento, ya está avalado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y ha recomendado su uso en especial para los niños con VIH.
Las compañías farmacéuticas hasta ahora estaban centradas en desarrollar remedios antivirales contra el VIH, los cuales logran extender la expectativa de vida significativamente. Sin embargo, uno de los mayores problemas es que muchos pacientes en sus primeras semanas después de diagnosticados de VIH, son víctimas de infecciones varias que amenazan su sistema inmunológico.
A pesar de lo importante que han sido estos antivirales para mejorar las expectativas de vida, ahora se descubrió que si a esos tratamientos de largo plazo se les agrega el antibiótico cotrimoxazole, se podrían prevenir muchas más muertes.
De acuerdo a los datos específicos que estregó el estudio, los pacientes analizados fueron 3.179, y mostró una reducción de 59% en las primeras 12 semanas, y de 44% entre las 12 y la 72 semanas.
La alta eficacia comprobada del antibiótico no ha sido suficiente para acelerar la disponibilidad y abastecimiento de la droga. Incluso hay quienes aún en África no tienen acceso a los antivirales, por lo que no es tan inusual que el proceso de masificación de este antibiótico sea tan lento.
Este aspecto de accesibilidad es muy importante, ya que el antiviral reduce en más del 90% las muertes por VIH, mientras que el antibiótico cotrimoxazole lo hace incluso en un mayor porcentaje.