02/12/2009
Llevar una vida equilibrada es esencial si se quieren disminuir los riesgos de sufrir algún paro cardíaco, infartos cerebrales y lamentablemente en muchos casos la muerte.
Según un estudio realizado en Estados Unidos, la meditación es una herramienta para poder disminuir en 50% las posibilidades de que las personas con enfermedad en las arterias, sufran paros cardiacos e infartos cerebrales.
Esta herramienta, según los expertos, podría transformase en una rutina necesaria para los enfermos que tiene algún problema al corazón. Además de esta reciente investigación, existen otras anteriores que demuestran que la meditación reduce la presión arterial, el stress psicológico y otros factores de riesgo para los enfermos.
Sin embargo, este es el primer análisis clínico que demuestra que practicar la meditación reduce los problemas cardiovasculares, según Robert Schneider, principal autor del estudio y director del Centro para la Medicina Natural y Preventiva.
La investigación se llevo a cabo durante 9 años, en los cuales se hizo un seguimiento de personas que tenían arterias coronarias estrechas y con un promedio de 59 años. Un grupo de ellos siguió la meditación trascendental, el resto realizó clases sobre cómo controlar los factores de riesgo y el estilo de vida que les convenía llevar.
Luego de estos nueve años, los investigadores determinaron que las personas que practicaron la meditación trascendental tuvieron una probabilidad un 47% menor de sufrir algún paro cardiaco. Asimismo, se observó una baja en la presión arterial y una disminución en los niveles de ansiedad de aquellas personas que presentaban cuadros de estrés.
Schneider agregó que este estudio “es equivalente a agregar una nueva clase de remedio para prevenir los problemas del corazón. En este caso, la nueva medicación deriva de la farmacia interna del cuerpo, estimulada por la práctica de la meditación trascendental” aseguró.
Referencia: neomundo.com.ar