Dieta mediterránea previene la depresión
20/11/2009
Comer sano no solo ayuda al organismo, sino también influye en nuestra salud mental, así lo comprobó un estudio sobre la dieta mediterránea.
La dieta mediterránea es famosa por lo saludable que es respecto a otras en el mundo. Una de sus características, es que está comprobado que aquellas personas que la consumen, tienen una esperanza de vida mucho mayor que aquellas que no lo hacen.
La dieta mediterránea se compone de muchas verduras, frutas, legumbres, cereales, pescado y por supuesto el infaltable aceite de oliva. Recientemente un nuevo estudio publicado por “Archives of General Psychiatry”, reveló que podría disminuir el riesgo de depresión entre un 40% y un 50%.
Miguel Ángel Martínez autor principal de este trabajo, declaró que la investigación “abre una vía importante al conocimiento, con el objetivo de anticiparse a este grave problema de salud pública”.
Dentro de las causas del hallazgo se encuentra el consumo de aceite de oliva, ya que según los profesionales este tipo de aceite “influye en la estructura de las membranas de las células nerviosas y mejora el funcionamiento de la serotonina, neurotransmisor implicado en la depresión”. Además, los ácidos grasos del pescado también ayudan a que el sistema nervioso central funcione correctamente y en el caso de las frutas y verduras, su ácido fólico y vitaminas participan en la síntesis de neurotransmisores y sustancias implicadas en el funcionamiento sistema nervioso central.
Lo esencial de esto es que las depresiones se pueden evitar y para ello es importante según Martínez que “seamos capaces de adaptarnos a algunos factores adversos, como las frustraciones cotidianas, y para esto es básico el buen funcionamiento del sistema nervioso central, que depende de un oportuno aporte de nutrientes”.
Es importante que los resultados de este estudio se tomen con cautela, no obstante el hecho de que la dieta mediterránea sea tan saludable, es sustancialmente mejor para nuestro organismo y mente que otros tipos de dieta.
Referencia: elmundo.es