Biomagnetismo, una alternativa para sanar

Equipo SaludActual

Conozca los fundamentos de la terapia que asegura curar dolencias con imanes.

En la búsqueda por el bienestar, a través del tiempo, el hombre ha desarrollado innumerables métodos para combatir las enfermedades y velar por la salud.

Así, algunos procedimientos se han basado en la ciencia y la medicina, mientras que otros tienen un origen alternativo.

Al respecto, la tendencia de los últimos años ha reflejado un interés por acceder a terapias no tradicionales, en algunos casos por la decepción experimentada por pacientes que no mejoran con tratamientos de la medicina alópata, por muy avanzada que sea.

En este camino paralelo, la pseudociencia propone un conjunto de terapias y tratamientos que no son comprobables bajo las reglas que impone el contexto científico, pero que prometen una sanación más rápida y segura que la que otorga la alopatía.

De esta forma, el Biomagnetismo se perfila como una opción no tradicional para liberarse de múltiples afecciones.

En cuanto a su origen, esta terapia nació en México, en 1988. Su precursor es el doctor Isaac Goiz, quien se dio cuenta de la influencia que tenían los imanes en el cuerpo cuando trataba a un paciente desahuciado de VIH-SIDA. Al corto tiempo, lo curó por completo con su método

¿Cómo funciona?

En Chile, la presidenta del Colegio de Biomagnetismo y Bioenergética de Chile, Marjorie Ortiz, explica que se trata de una técnica muy moderna de sanación no invasiva, que regula el Potencial de Hidrógeno del cuerpo (pH). Así, por medio de los imanes, se combate la hiperacidez e hiperalcalinidad que producen desde las enfermedades más simples hasta las crónico degenerativas. En otras palabras, se plantea que el Biomagnetismo permite la restauración de la homeostasis interna de un sistema vivo.

De acuerdo a la especialista, se pueden sanar enfermedades simples como un resfriado común, hasta enfermedades como el Lupus y cánceres de todo tipo, cuando estos no han entrado en metástasis.

El procedimiento es sencillo. El paciente debe tenderse sobre una camilla, vestido y con zapatos. Una vez allí, el terapeuta realiza algo conocido como "rastreo protocolario", momento en el se aplican campos magnéticos en par, lo que produciría una pequeña corriente eléctrica bajo la piel, suficientemente fuerte como para causar efectos biológicos. Más tarde, se llega a una conclusión, revelando el origen de la posible enfermedad del paciente.

De acuerdo a Marjorie Ortiz, teóricamente se considera que una persona debe ser sanada en una sola sesión, pero aclara que no se puede omitir que habrá algunos pacientes que no sanen por completo cuando un órgano, una glándula o un sistema haya sufrido daños irreversibles.

Durante sus cuatro años de dedicación exclusiva al Biomagnetismo, Ortiz asegura que le ha tocado ser testigo y ayudar en casos de sanación, donde los resultados han sido, según dice, sorprendentes.

Por ejemplo, menciona que curó a un paciente con el Síndrome de Gillain Barré (producto de la aplicación de una vacuna para la influenza). El virus causó estragos en él, provocó que su sistema inmune atacara parte del sistema nervioso, y presentó síntomas inflamatorios que ocasionaron debilidad, con pérdida de la función muscular, al extremo de paralizar sus miembros inferiores. Al cuadro se sumó dificultad respiratoria, hipotensión arterial y falta de coordinación.

Así, tan sólo a la semana de haber realizado la primera sesión de Biomagnetismo, no habían secuelas ni rastros de ninguno de esos síntomas, y el paciente estaba haciendo su vida normal como antes de contraer la enfermedad. De esto ya han pasado 2 años, asegura la Presidenta del Colegio de Biomagnetismo y Bioenergética de Chile, y comenta que hasta el día de hoy se encuentra con excelente salud.

La institución que preside Ortiz tiene como función difundir el ejercicio responsable de la terapia como medicina alternativa, complementaria e integrativa, teniendo por objeto el perfeccionamiento, la protección, el desarrollo y la racionalización de la técnica, siendo el referente y representante a nivel nacional e internacional de los terapeutas de Biomagnetismo en Chile. Además, crea y organiza seminarios y diversas actividades que tienden a mejorar la preparación técnica y práctica de sus terapeutas colegiados.

Sin embargo, existe mucho escepticismo alrededor de este método que parece revolucionario, ya que la mayor crítica que recibe es que no tiene fundamentos válidos. Esto se debe a que su creador mexicano, el Dr. Goiz, no posee artículos científicos publicados en ninguna revista sometida al proceso de revisión por pares (sistema usado para validar trabajos escritos y solicitudes de financiación con el fin de evaluar su calidad, originalidad, factibilidad, rigor científico, etc.) y no tiene tesis doctorales en ninguna universidad acreditada.

Pese a ello, de acuerdo a los datos que entregan en el Centro doctor Goiz de Chile, el experto ha tratado exitosamente a más de 300.000 pacientes en todo el mundo y ya tiene más de 20.000 "discípulos" trabajando en toda América, Europa y China.

¿Es el Biomagnetismo una terapia que sana enfermedades, o un simple efecto placebo? Por ahora, esa respuesta sólo la han descubierto quienes experimentaron la técnica y aseguran que su vida cambió y sanó para siempre.

Pía Verdugo.

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